
Felipe Córdoba, excontralor y precandidato presidencial, propone un modelo de gobierno basado en eficiencia, trabajo duro y soluciones reales para los colombianos.
Felipe “Pipe” Córdoba lanza un mensaje claro y contundente a los colombianos: el país no necesita más discursos, ideologías o promesas vacías. Necesita resultados. Y él asegura tener la fórmula para lograrlos.
En su reciente intervención como precandidato presidencial, el excontralor general de la República hizo un balance de su gestión y sentó las bases de lo que será su apuesta presidencial para 2026: un gobierno que madruga, trabaja y entrega resultados concretos, como lo hizo durante su paso por la Contraloría.
Un legado que habla con cifras
Durante los cuatro años que lideró el control fiscal del país, Felipe Córdoba asegura haber conseguido lo que nadie en un siglo de historia institucional había logrado: la recuperación de más de 39 billones de pesos para las finanzas públicas. “En 100 años de la Contraloría, no hay un resultado de esa magnitud. Y no lo digo por ego. Lo digo porque Colombia necesita hechos, no discursos”, afirmó.
Entre los logros más destacados de su gestión se encuentran:
750 obras reactivadas, muchas de ellas consideradas “elefantes blancos”.
4,3 billones de pesos recuperados en el caso Hidroituango.
3,9 billones rescatados en el escándalo de Reficar.
Supervisión e intervención efectiva en el Túnel de La Línea, otra obra emblemática y polémica.
Implementación de tecnología de control fiscal en tiempo real, haciendo uso de herramientas digitales para una fiscalización moderna y eficiente.
“Yo no llegué a calentar un puesto. Llegué a trabajar”, enfatizó Córdoba, quien asegura que su ética de trabajo será la misma si llega a ocupar el cargo más alto del país. “Desde la Presidencia vamos a madrugar y trasnochar trabajando por Colombia”.
Más allá de la ideología: soluciones reales
En tiempos de polarización política, Córdoba ha optado por desmarcarse de los debates ideológicos. Según él, los problemas reales del país —la salud, la inseguridad, el hambre— no son de izquierda ni de derecha. Son desafíos comunes que deben enfrentarse con carácter, eficiencia y compromiso.
“Colombia no necesita más divisiones. Necesita un gobierno que trabaje duro y sin odio. Vamos a dejar atrás las peleas inútiles y nos vamos a concentrar en sacar este país adelante”, aseguró.
Su mensaje busca conectar con una ciudadanía cansada del ruido político y ávida de líderes con vocación de servicio. Su lema, “Volver a Confiar”, es tanto una invitación como un reto: recuperar la credibilidad de las instituciones a través del trabajo visible y los resultados palpables.
Un plan económico con foco en el ciudadano
En materia económica, Felipe Córdoba propone un enfoque que favorezca directamente el bolsillo del ciudadano. Entre sus compromisos más llamativos están:
Reducción progresiva del IVA hasta el 7%, lo que permitiría aliviar el costo de vida de millones de colombianos.
Impuesto de renta al 24%, buscando estimular el crecimiento económico sin sacrificar la inversión.
Una reforma constitucional que prohíba nuevas reformas tributarias durante al menos 10 o 15 años, brindando estabilidad y previsibilidad al sistema fiscal del país.
“Hay que dejar de ahogar a la gente con impuestos. La platica tiene que estar en el bolsillo del ciudadano, no atrapada en la burocracia del Estado”, afirmó.
Una historia personal que inspira
Más allá de los resultados y los proyectos, Felipe Córdoba también compartió aspectos íntimos de su historia familiar, recordando con emoción a sus padres: una madre que luchó contra el lupus y un padre médico que trabajó toda su vida sin recibir una justa retribución económica.
“De ellos aprendí la resiliencia, el valor del trabajo y el amor por servir. Me he sentido cansado, frustrado, con ganas de tirar la toalla. Pero pienso en cada colombiano que se levanta y le pone el pecho a la brisa, y me digo: Pipe, vale la pena seguir”, confesó.
Este testimonio busca acercar su figura al ciudadano común, mostrando que detrás del político hay una persona con vivencias similares a las de millones de colombianos.
¿Un nuevo estilo de liderazgo?
Córdoba representa una nueva generación de líderes que no apuesta por la confrontación ni por las fórmulas populistas, sino por la gestión técnica, la eficiencia pública y la cercanía con la ciudadanía. Sus años como contralor le han permitido entender las entrañas del Estado y ahora quiere aplicar esa experiencia para transformarlo desde la raíz.
Con una campaña centrada en hechos, austeridad, cercanía y una visión clara del país, “Pipe” Córdoba se perfila como un candidato que puede capitalizar el cansancio ciudadano con la política tradicional.
¿Estamos listos para un gobierno de hechos?
Felipe “Pipe” Córdoba entra al escenario electoral con una promesa sencilla pero poderosa: cumplir y trabajar como ya lo ha hecho antes. Su apuesta no es ideológica, sino pragmática. No se basa en lo que podría ser, sino en lo que ya demostró que puede hacer.
Colombia está en una encrucijada: seguir en el círculo vicioso del discurso político o apostar por líderes que se arremangan la camisa y trabajan sin descanso. Según Córdoba, la respuesta es clara: el país necesita resultados. Y él promete entregarlo.