
Se trataría de unos terrenos en el municipio de Sabaneta por unos 1.733 millones de pesos.
El expresidente del Senado, Juan Diego Gómez y su hermano son acusados por una familia de un presunto caso de estafa, tras una denuncia penal por hacer negocios por más de mil millones de pesos con inmuebles que no le pertenecían.
El ex congresista y ex candidato a la Gobernación de Antioquia por el partido Conservador, Juan Diego Gómez y su hermano David Orlando Gómez, deberán presentarse ante un juez de conocimiento en una audiencia concentrada de acusación y conciliación, luego de que la familia de apellido Ramírez los denunciara penalmente por hechos ocurridos entre los años 2017 y el 2023, cuando el excongresista se desempeñaba como presidente del Senado y su hermano era gerente de la Zona Andina de la Central de Inversiones.
El caso se basa en que supuestamente Juan Diego Gómez les ofreció unos terrenos en Sabaneta por unos 1.733 millones de pesos, en hechos que ocurrieron el 3 de junio de 2021, pero puso la condición de que el negocio se hiciera a través de su hermano David Orlando. Las presuntas víctimas accedieron porque ya habían tenido un acercamiento al excongresista y confiaban en él.
Así lo narró uno de los denunciantes Alejandro Ramírez: “Las reuniones que yo celebraba siempre eran todas con Juan Diego Gómez. Lo que pasa es que él me decía que para no perjudicar la investidura que él tenía en su momento que él no se quería ver pues como como en temas de plata ni en temas”, contó.
Según la denuncia, los hermanos Gómez recibieron diferentes inmuebles y efectivo como forma de pago del terreno, pero comenzaron a mentirle a los Ramírez acerca de los lotes que tenían disponibles para la venta, como lo expuso Alejandro Ramírez: “Y haciéndonos caer en errores, pues para obviamente ellos, primero enriquecerse ilícitamente y segundo, pues no devolver ningún dinero que Juan Diego, para curarse en salud, me puso a firmar un contrato de transacción supuestamente por un negocio que habíamos hecho, pero me lo puso a firmar con el hermano David Orlando”.
De acuerdo con los denunciantes les hacían creer que los bienes ya eran de su propiedad y que iban a ser escriturados a su nombre, pero luego se dieron cuenta que continuaba siendo de terceras personas.
En ese sentido, la Fiscalía destacó que mediante llamados de procesos a conciliación, las presuntas víctimas ‘‘han intentado recuperar su patrimonio económico, pero ello no ha sido posible, puesto que los victimarios lo único que han hecho es suscribir compromisos económicos que han sido incumplidos uno tras otro’’.
Por lo anterior se les imputan cargos por estafa mayor cuantía, sin embargo en respuesta a Blu Radio, el exsenador Juan Diego Gómez negó haber tenido esa clase de negocios y conocer a miembros de la familia Ramírez.
“No he hecho negocio alguno con el señor Ramírez. Me extraña profundamente esta situación. Lo segundo, es que para la época del presunto negocio, yo era Congresista de la República, razón por la cual, la competencia le correspondería a la Corte Suprema de Justicia y no a la Fiscalía General de la Nación”, puntualizó.
Cortesía: Blu Radio