En una victoria contundente, María Corina Machado se impuso en las primarias de la oposición venezolana, obteniendo 552,430 de 601,110 votos escrutados hasta ahora. A pesar de liderar, su participación en las elecciones generales se ve amenazada por una inhabilitación política de 15 años, una realidad que desafía con firmeza.
La frase «Expropiar es robar» la catapultó a la fama al desafiar a Hugo Chávez, marcando su posición firme contra las políticas socialistas. Aunque Carlos Prosperi, su más cercano rival, denunció irregularidades, Machado se impuso con un margen significativo.
Con 56 años, María Corina Machado es conocida por su franqueza y postura inequívoca. Su liderazgo se forjó desafiando a Chávez hace una década, y ahora promete poner fin al socialismo si llega al poder.
A pesar de su victoria en las primarias, la inhabilitación política proyecta una sombra sobre su candidatura presidencial. Sin embargo, Machado, inquebrantable, proclama: «Esta lucha es hasta el final», alimentando la esperanza entre sus seguidores.
Diosdado Cabello, figura clave del chavismo, la apoda «María con ira» y «La sayona», comparándola con un espíritu del folclore venezolano. Aunque Cabello insiste en su inhabilitación, María Corina Machado desafía: «¡Que no se vista que no va!»
A pesar de la extensión de su inhabilitación a 15 años, María Corina Machado niega haber recibido notificación alguna. Critica la mesa de diálogo entre gobierno y oposición, argumentando que solo busca coexistencia. Para ella, la única negociación posible es la salida de Maduro.
La política recorre el país en auto, ya que las autoridades le prohíben viajar en avión. En retenes policiales, promete un mejor país a los soldados. Su equipo afirma que algunos militares le han expresado apoyo.
María Corina Machado, firme y valiente, recuerda que «Águila no caza moscas». A pesar de las dificultades, su campaña se enfoca en la recuperación económica y la reunificación familiar tras la migración masiva provocada por la crisis.
Con hijos viviendo en el extranjero debido a la crisis, María Corina Machado experimenta personalmente la separación familiar. Su jefa de campaña describe cómo besa su teléfono al recibir mensajes de ellos.
Inició su carrera política en 2002 con la creación de Súmate, organización que abogaba por un referendo revocatorio contra Chávez. A pesar de ser electa diputada en 2010, fue destituida en 2014 por denuncias de violencia y su participación como «embajador alterno» de Panamá.
Este triunfo en las primarias devuelve a María Corina Machado al escenario político, recordando su enfrentamiento con Chávez en 2012. Su liderazgo, según analistas, surge de ofrecer una alternativa coherente a la oposición tradicional.
Mientras el país espera la resolución de su situación política, María Corina Machado permanece decidida: «¡Esta lucha es hasta el final!», un mantra que resuena entre sus seguidores, quienes ven en ella la posibilidad de un cambio radical en Venezuela.